Dolores Ibaruri, en 1970: “Los comunistas nos pronunciamos por el reconocimiento, sin ninguna limitación y con todas sus consecuencias, del derecho de las nacionalidades a la autodeterminación”. “El derecho a la libre determinación significa el derecho de Euzkadi, Cataluña y Galicia a formar parte del Estado español o a separarse de éste y constituir Estados nacionales independientes”.
El passat és d’una sola peça.
Dos comentaris de premsa. El primer, d’El Roto. “El mercado de futuros lo llevan los
banqueros, y el de pasados, los historiadores”. El segon, en aquest mateix diari, el mateix dia: “Per primera vegada un partit d’abast estatal es compromet [i] per escrit a donar suport a l’exercici del dret a decidir del poble de Catalunya”.
Es refereix a l’acord entre IU i ICV-EUiA. Però no és la primera vegada que un partit
estatal defensa el dret d’autodeterminació. Deixen sortir tan poques vegades l’esquerra
a la premsa, que aprofito ara per matisar.
El juny del 1935, José Díaz, d’ofici forner i secretari general del PCE, anuncia els quatre punts que el PCE proposa al programa de la Concentració Popular Antifeixista, que
s’acabaria dient Front Popular i guanyaria les eleccions, excepte a ca nostra. El segon punt diu: “Liberación de los pueblos oprimidos por el imperialismo español. Que se conceda
el derecho de regir libremente sus destinos a Cataluña, a Euzkadi, a Galicia y a cuantas nacionalidades estén oprimidas por el imperialismo de España”.
I ho explica: “¿Es que va a resolver el gobierno actual el problema de las nacionalidades oprimidas? Yo os digo que no. Y la prueba es ese proceso que se sigue por el tribunal
más reaccionario del país contra los consejeros de la Generalidad. Va a recaer sobre ellos el peso de una sentencia monstruosa. Treinta años de presidio les piden, y no hay duda de que serán condenados a esa pena. ¿Y sabéis por qué van a ser condenados? Porque ese proceso no es sólo el de los hombres a quienes se juzga. Quien va a ser condenado con esa sentencia monstruosa es todo el pueblo de Cataluña, por su rebeldía, por su levantamiento contra la opresión del imperialismo español. Y contra esa monstruosa condena, contra ese odio a la libertad de Cataluña, yo os digo lo que antes: ¿es que no estamos obligados a luchar en la Concentración Popular Antifascista por la liberación de esos hombres, a quienes se condena como expresión del odio y la opresión imperialista? [Voces: “¡Sí, sí!”]. Pues entonces, camaradas, tenemos una razón más para unirnos todos: la lucha por la liberación de Cataluña, por el derecho de Cataluña y de todos las nacionalidades españolas a disponer de sus destinos. [Aplausos.]”
Efectivament, quatre dies després Companys i el seu govern són condemnats a trenta anys de
reclusió. Només el triomf dels treballadors i les classes populars espanyoles a les eleccions
de febrer del 1936 els varen tornar la llibertat, a ells i als obrers asturians.
El setembre del 1970,en plena efervescència de la lluita clandestina, al temps del procés de Burgos, Dolores Ibarruri, presidenta del PCE, es dirigeix al Comitè Central ampliat per presentar l’informe España, Estado multinacional.
Dolores Ibarruri comença així: “Al exponer en esta reunión, y en nombre del Comité Ejecutivo, el problema nacional, os comprometo u obligo a añadir, entre los múltiples motivos que impulsan y animan nuestra lucha contra la dictadura, uno más: el de la defensa del derecho de las nacionalidades de nuestro país a la autodeterminación; ya que, entre las cuestiones que en la lucha por la democratización de España deberán ser resueltas con prioridad a otras más generales, está el problema nacional, que es en substancia el derecho de Cataluña, Euzkadi y Galicia a disponer libremente de sus destinos”. I seguía: “Los comunistas nos pronunciamos por el reconocimiento, sin ninguna limitación y con todas sus consecuencias, del derecho de las nacionalidades a la autodeterminación”. “El derecho a la libre determinación significa el derecho de Euzkadi, Cataluña y Galicia a formar parte del Estado español o a separarse de éste y constituir Estados nacionales independientes”.
No pretenc donar cap lliçó d’història. Parl del passat, no de la història. El passat és com la mar, tard o prest retorna el que té dedins. No se’n pot agafar una part o amagar-ne una altra. És d’una peça, i és al nostre costat, ajuda tots aquells que volen canviar el present, perquè, com sabia Walter Benjamin, la força per lluitar contra els dominadors no ens ve de la imatge d’uns futurs néts alliberats, sinó de la imatge dels nostres padrins maltractats. Són ells mateixos, els del passat, que segueixen lluitant aquí, ara.
Les cites poden comprovar-se a:José Díaz, “Palucha por la unidad en plena reacción”, discurs al Monumental Cinema de Madrid,2/6/1935, a Tres años de lucha, Ed. Nuestro Pueblo, Tolosa de Llenguadoc 1947;i a: Dolores Ibarruri, España, Estado multinacional, Éd. Sociales, París 1971.
Publicat en Ara, 8.6.2013, pag.31
Josep Quetglas